En cuanto a las diferencias entre un atornillador para pladur frente a uno convencional, destacamos varias cosas.
En primer lugar, el de pladur destaca por el regulador de profundidad,que es la pieza clave que nos ayuda a mejorar la precisión sobre cómo han de quedar los tornillos autoroscables respecto a la placa de pladur o cartón-yeso, pudiendo quedar ligeramente hundidos, embutidos o enrasados. Un detalle que facilita el trabajo a posteriori.
Pero no es la única diferencia, dado que por lo general, el número de revoluciones del motor es superior en el atornillador de pladur versus el convencional. Concretamente, pueden ofrecer un giro de entre 4000 y 6000 rpm, lo que dista mucho de cómo gira un convencional a apenas 1200 y 2800 rpm.
En cuanto al ruido, ojo, porque el convencional tiene embrague más silencioso. El de pladur es un tanto molesto a causa del ruido del embrague.
Además, tal como ocurre con los atornilladores clásicos, existen versiones que funcionan con cable y también a batería.
