Las coronas diamantadas son un tipo de herramienta o accesorio de corte que normalmente se emplea para perforar materiales duros. Gracias a sus bordes con diamantes industriales duros, permiten cortar distintos materiales de forma eficaz.
Hoy analizamos en detalle para qué sirven.
Corona diamantada: ¿para qué sirve?
Una corona de diamante o “diamantada” es una broca con forma cilíndrica que cuenta con dientes revestidos de polvo de diamante.
Su principal uso y finalidad es perforar materiales resistentes como hormigón, granito y cemento, así como superficies duras y frágiles al mismo tiempo como cerámicas, porcelana y porcelanato.
A diferencia de otras herramientas, las coronas diamantadas destacan por su capacidad para hacer perforaciones con suma profesionalidad y eficacia sin dañar el material. El resultado es muy profesional, por eso se emplea mucho en la industria.
Los resultados están a años luz respecto a otras herramientas, independientemente de que se desee cortar granito o porcelana. Para todos estos casos, es una herramienta que cumple con creces y que permite obtener unos resultados profesionales.
Claro que, para conseguir los resultados deseados, es fundamental elegir la corona diamantada ideal según el tipo de corte o trabajo a realizar. Por ejemplo, corte en seco o húmedo.
Normalmente, el corte en seco se utiliza con las amoladoras o radiales en las reformas y obras menores, cuando se busca un corte rápido y sencillo. Mientras que el corte húmedo es más frecuente en entornos industriales.
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¿Te ha quedado alguna duda sobre el potencial de las coronas diamantadas y sus usos? Pregúntanos.